¿Sabes cuál es el mayor destructor de tus Sueños?

Existen muchos “destructores” que colaboran a la muerte de nuestros sueños. Entre ellos están los fracasos, falta de recursos, indisciplina, falta de compromiso, de enfoque, etc.

¿Pero cuál es el destructor principal, el asesino de los sueños?

Siempre creí que era la falta de constancia o la incapacidad de levantarnos después de haber fracasado. Pero creo que estaba equivocado.

Esta semana estaba escuchando en la radio a John Acuff, autor del Bestseller “Quitter”, que estaba conversando sobre su filosofía acerca del fracaso. Él dijo algo ese día que fue revelador y sentí que me hablaba a mí directamente. Él dijo:

“La impaciencia ha matado más sueños que el fracaso…”

Al escuchar esa frase reflexioné por un tiempo acerca de mi vida y lo que he visto en otros y llegué a la conclusión de que tenía toda la razón.

La impaciencia es el principal destructor de los sueños.

Comenzamos una dieta, y cómo no bajamos 10 kilos en 1 semana nos desanimamos y renunciamos. Empezamos entusiasmados nuestro negocio de venta directa, para tirarlo todo por la borda al cabo de tres meses porque no hemos logrado la riqueza que esperábamos.

Peor aún, a veces tenemos éxito, pero la ambición de crecer mucho y más rápido nos hace construir una gran estructura sobre pilares débiles; y de repente, todo se viene abajo.

La impaciencia es tu peor enemigo.

Existe algo que me ha ayudado en la vida que quisiera compartir contigo. Puede ser que te sea de ayuda.

Cuando me embarco en la búsqueda de alguna meta o algún proyecto, siempre busco prepararme tanto para el éxito como para el fracaso. Hago decisiones por adelantado que me protejan en caso de que los resultados sean peor o mejor de lo esperado.

Una de las cosas que he aprendido es que muchos somos buenos preparándonos para el fracaso; tenemos planes alternos, fondos de emergencia, etc. Pero rara vez he visto personas que se preparen de antemano para el éxito. Por eso creo que muchas personas se derrumban luego de tener un éxito inesperado.

Por darte un ejemplo, antes de comenzar este blog, tomé la decisión de escribir tres artículos a la semana por dos años sin importar cuantos lectores tuviera. Es decir, mi compromiso era escribir independientemente de los resultados. Esa era mi preparación para el fracaso… no iba a renunciar en 3 meses, o 6 meses o un año.

Por el otro lado, también tomé la decisión de lo que yo quería que el blog se convirtiera independientemente de que tuviera miles de lectores al día. Por darte un ejemplo específico, nunca quise colocar publicidad de absolutamente nada que yo no hubiera usado, leído, experimentado y que estuviera convencido que sería de gran ayuda para los lectores del blog.

Tal como debes saber, el blog creció más rápido de lo que esperaba. Apenas comenzó a crecer comenzaron a llegar ofertas. Ofertas de personas que querían que colocara productos en mi blog que me prometían buen dinero. Propuestas de publicidad, cursos, juegos, videos, etc.

La realidad es que si algún día promuevo o vendo algo en este blog va a ser porque estoy 100% convencido de que será de bendición para ti. Será porque lo he utilizado, experimentado, vivido y pienso que será necesario para tu crecimiento como líder. Antes de eso, no verás nada en este blog que te cueste dinero… es mi manera de desarrollar la paciencia.

Recuerda, la impaciencia es el primer destructor de sueños.

Si has fracasado en la jornada hacia tus sueños, si has encontrado barreras, retrasos, frustraciones y contratiempos… ten paciencia.

Si por el contrario, has tenido éxito y las cosas han salido mejor de lo que esperabas… ten paciencia.

“La paciencia es un árbol de raíz amarga pero de frutos muy dulces.”

(foto cortesía de Fresh Foto)