¿Qué significa ser emprendedor? 3 habilidades que necesitas para ser uno

Hoy quiero compartir un tema que me apasiona mucho y que me gustaría que aplicaras lo que aprendieras. El tema en cuestión es el emprendimiento: ¿qué significa emprender y cuáles son las habilidades para ser uno?

¿Qué es ser emprendedor?

Emprender viene del latín in “en” y prendere “tomar”. El emprendedor es aquella persona que ve una posibilidad y la toma. El emprendimiento es una oportunidad que se crea a través de una necesidad que existe en el mercado y que una persona al observarla, siente que la puede solucionar, y a través de este proceso, logra construir un negocio.

Importancia de ser emprendedor

Hace algunos años me encontré con esta frase que me llegó profundamente porque invita a la reflexión:

“Casi todas las personas viven su vida en una silenciosa desesperación y se van a la tumba con la canción todavía en ellos”

Cuando la leí me impactó porque en algún momento de mi vida, yo fui una de esas personas. Tenía prácticamente todo lo que alguien pudiese imaginar para su vida: un excelente empleo, éxito, entre otras; pero todavía tenía una canción que no podía cantar a todo pulmón. Estoy seguro que hoy eso también te puede estar sucediendo a ti.

En este momento tenemos una oportunidad de oro para emprender, y es que el internet democratizó el emprendimiento, sea que tengas un negocio online o en físico, la web nos ofrece no una, sino miles de oportunidades para desarrollarlo.

Anteriormente era mucho más difícil tener tu propio negocio, escribir un libro, conducir un programa de radio, etc. Existían muchas personas que decidían quiénes podían cumplir sus sueños y quiénes no.

Ahora, gracias a la revolución de internet, cualquier persona puede crear su propio podcast, tener su blog y escribir su ebook, entre otros.

Hoy existen muchas más oportunidades que solo están esperando por ti para ser desarrolladas. Como lo dije antes, es la época de oro para emprender.

3 habilidades que necesitas desarrollar para ser un emprendedor 

Se trata de tres características que necesitas desarrollar para poder emprender. Ellas son:

Dale la bienvenida a los problemas 

Tendemos a ver los problemas como algo negativo. Pero la verdad que la raíz de todo emprendimiento es un problema. Detrás de cada invención exitosa hubo un problema que fue resuelto, detrás de todo negocio exitoso hubo un problema que fue solucionado. No rechaces los problemas, ve cómo puedes resolverlos para ti y para otras personas.

Se puede decir que en el emprendimiento lo más importante no es conseguir una idea sino es conseguir un problema, la idea nace de la resolución de ese problema.

Muchos emprendimientos fracasan porque parten solamente de la idea y no del problema. Las personas pagan para que les resuelvan los problemas y tu negocio debe nacer de la necesidad de resolver un problema.

Desarrolla una tendencia a la acción

Existen básicamente dos tipos de personas, las que tienen tendencia a pensar y las que tienen tendencia a la acción, todos tenemos un poco de ambos, pero tendemos más a uno de los dos. Sin embargo, cuando eres emprendedor, tienes que ser más de acción.

Ser pensador es muy bueno, pero si quieres emprender tienes que hacer que las cosas sucedan, y eso solo se logra actuando, moviéndote.

Debes ser capaz de agarrar una idea y buscar la manera de ejecutarla. La acción es una habilidad que puedes aprender, pero debes dejar de un lado al miedo.

El miedo es una emoción que está diseñada por nuestro sistema nervioso para protegernos del peligro en el marco de la supervivencia, y eso es bueno. Lo que debes evitar, es dejar de hacer algo por tener miedo. Las consecuencias siempre van a ser mucho menos más graves de lo que piensas.

Con el tiempo aprendí que el miedo te daba dos cosas, o te ayudaba a crecer y a mejorar como ser humano así fracasaras, o te llenaba de arrepentimiento para el resto de tu vida. Uno de los principios que entendí y aplico a mi vida es que el dolor del fracaso puede durar un día, un mes o hasta un año, pero el dolor del arrepentimiento dura toda la vida.

Otro punto importante a tener en cuenta sobre el miedo, es que la mejor manera de trabajarlo es comparándolo con los sueños, el miedo es la parte negativa, lo que no ha sucedido que es malo, y los sueños, la parte positiva, lo que no ha sucedido que es bueno.

Desarrolla una mentalidad de emprendedor vs. empleado 

En esta parte no me estoy refiriendo a que los empleados actúan de una manera específica, me estoy refiriendo a las personas que tienen ‘mentalidad’ de empleado. Una persona con mentalidad de empleado piensa “yo trabajo, tú me pagas”, tiempo por dinero. Esas personas, en general, no tienen la creencia o convicción de invertir hoy, para algo distinto mañana.

Una persona con mentalidad de empleado ve algo sucio en la oficina y dice: “¿dónde está la señora que se le paga para que limpie?” Mientras que un dueño, agarra la escoba y lo limpia él mismo.

Esa es la mentalidad que debes emplear, la del dueño, de empresario, de emprendedor, el de invertir y trabajar hoy en algo para esperar resultados mañana.

¿Qué es lo más importante de todos estos aspectos? 

Para concluir, todo se resume en la acción. Debes hacer que las cosas pasen, actuar, moverte. Esta es la única manera en que tu emprendimiento pueda despegar, de lo contrario, no sucederá nada. Por último, ten presente lo que te compartí sobre el miedo y úsalo como motor para alcanzar tu meta.